Las bombas encuentran amplio uso en los sectores enológico, alimentario, químico, cosmético y farmacéutico. Las palas flexibles del impulsor se deforman y aspiran el líquido hacia el interior de la bomba, transfiriéndolo de manera continua hacia la boca de salida (descarga). Este principio combina bombeo delicado con una alta capacidad de autocebado. Excelentes rendimientos incluso a bajo régimen que permiten la transferencia de fluidos delicados y frágiles, viscosos hasta 50.000 cp, incluso con partículas en suspensión, sin airear, emulsionar ni dañar las partes sólidas. Transferencia del producto sin botones (flujo continuo ideal para dosificación, llenado y filtrado).